El incienso tiene muchas formas, pero en la definición más simple, es cualquier materia vegetal que se quema por sus propiedades aromáticas o espirituales. La mayoría de la gente está familiarizada con los palitos de agarbatti indios, o pequeños conos, pero incluso la materia prima vegetal como las astillas de madera de palo santo o la hierba dulce pueden considerarse incienso.
Formas populares de incienso:
- Palos
- Espirales o Bobinas
- Conos
- Polvos sueltos
- Materias primas vegetales
La historia y los beneficios de quemar incienso
El acto de quemar incienso ha sido un ritual importante desde la antigüedad. Se cree que se originó en Egipto en la época del Imperio Antiguo, una vez fue utilizado por los sacerdotes para fumigar tumbas. El incienso tiene una larga historia de uso junto con ceremonias, rituales y ocasiones espirituales y religiosas.
La quema de incienso se descubrió en la India y el sur de Asia ya en el año 3300 a. Usado junto con la adoración y la oración, se creía que quemar incienso podía alejar a los malos espíritus mientras purificaba el entorno.
Hace más de 2000 años, el comercio de especias e incienso jugó un papel económico importante entre el este y el oeste. En aquellos días, la Ruta del Incienso del Medio Oriente serpenteaba a través del Medio Oriente hasta la región del Mediterráneo, donde fue popularizada por el Imperio Romano. Se estima que 3.000 toneladas de incienso recorrieron esta ruta cada año.
¿Qué hace el incienso espiritualmente?
Los propósitos espirituales de quemar incienso pueden variar según la ceremonia religiosa o la intención durante su uso. Las iglesias católicas pueden quemar incienso para conectar a su comunidad con el legado de su patrón fundador. La madera de palo santo se quemaba durante el apogeo de los incas para eliminar la mala energía y ha sido adoptada más recientemente por una creciente comunidad de personas conscientes de la energía.
Hoy en día, quemar incienso es sinónimo de las prácticas de varias religiones diversas, incluyendo el catolicismo, el budismo y el hinduismo, pero su uso va más allá de lo espiritual, ya que ahora se usa comúnmente en estudios de yoga, oficinas de bienestar y en nuestros propios hogares.
Cómo utilizar el incienso
Si bien la forma de quemar incienso puede variar mucho, su función esencial es quemarse con el tiempo. Use un encendedor, un fósforo u otra llama abierta para encender el punto más pequeño del incienso. Deje que se prenda fuego, luego apague rápidamente la llama. Lo que queda debe ser una brasa ardiente que arderá lentamente y liberará sus compuestos aromáticos.
Coloque el incienso en un plato diseñado específicamente para incienso o en un recipiente con arena. Puede apagar la brasa difuminándola sobre una superficie dura, pero por lo general se espera que deje que se apague. Mantenga siempre las brasas y las llamas abiertas alejadas de cualquier material inflamable, como cortinas, papel o hierbas secas.
¿El incienso es malo para la salud?
Sentarse alrededor de una fogata es tan fundamental para el comportamiento humano como caminar sobre dos piernas y hacer conexiones abstractas. Quemar incienso lleva esa actividad a un nivel más pequeño. Se han realizado algunos estudios sobre el humo del incienso y el impacto en la salud humana. Algunos de estos estudios podrían considerarse sesgados (pagados por compañías tabacaleras). La calidad de los materiales puede variar, por lo que es importante comprar incienso que enumere sus ingredientes.
Un tipo insidioso de ingrediente sigue apareciendo en el mercado del incienso, haciendo que las resinas caras parezcan más baratas con el uso de fragancias sintéticas. Mucha gente quemará incienso y preguntará "¿Por qué el incienso me da dolores de cabeza?" La respuesta puede tener que ver con las fragancias sintéticas.
Los beneficios las esencias
Si estás quemando incienso hecho con ingredientes totalmente naturales, hay muchos beneficios que puedes obtener de la experiencia. El acto de complacer nuestros sentidos olfativos es más poderoso de lo que crees.
La idea de la aromaterapia se basa en el hecho de que las sustancias aromáticas se pueden utilizar con fines curativos y medicinales. Cuando percibimos un olor, se envían señales a nuestro sistema límbico. Esta parte del cerebro es responsable de la memoria, las emociones y la regulación hormonal. Diferentes olores desencadenan diferentes respuestas en nuestro cerebro.
Respirar aceites esenciales y aromas agradables del incienso quemado puede crear varios efectos deseados en nosotros, pero estos son algunos de nuestros preferidos:
Aumenta la calma y el enfoque. Se ha demostrado que los aceites esenciales de plantas como el romero, la menta y los cítricos mejoran la cognición mental, la claridad y el enfoque.
Reducir el estrés y la ansiedad. Algunas hierbas son conocidas específicamente por su capacidad para aliviar la ansiedad y frenar el estrés. Por ejemplo, respirar esencia de lavanda ha demostrado ser efectivo para reducir la ansiedad en varios estudios.
Ayuda a dormir. La lavanda también es conocida por sus efectos sedantes y se considera que favorece el sueño y combate el insomnio. Quemar incienso con aceite esencial de lavanda mientras te preparas para ir a la cama puede ayudarte a quedarte dormido más rápido.
Complementar una práctica de yoga o meditación. El incienso tiene la reputación de estar asociado con el yoga y la meditación. Dado que algunos de los aceites esenciales más utilizados para perfumar las varitas de incienso ayudan a aliviar el estrés y aumentan la concentración, quemar incienso es un complemento perfecto para una rutina de yoga y meditación.
Estimular la creatividad. Quemar incienso puede ayudar a impulsar la creatividad y el estado de flujo al despejar y estimular la mente.
Purifica su espacio. Los monjes budistas han estado usando incienso para purificar su atmósfera durante miles de años. ¡Sorprendentemente, un estudio demostró que quemar incienso durante una hora redujo las bacterias en el aire en un 94 %!
El simple placer de disfrutar de un agradable aroma. Por supuesto, el simple hecho de disfrutar de un olor es un beneficio por derecho propio. Tomar aromas placenteros en realidad tiene la capacidad de hacernos más felices, desencadenar buenos recuerdos y mejorar nuestro estado de ánimo.
Si está interesado en quemar incienso por alguno de estos efectos positivos, asegúrese de buscar el de mejor calidad. El incienso hecho con materiales de baja calidad y fragancias sintéticas es en realidad un contaminante, especialmente cuando se quema en espacios reducidos. Busque empresas que enumeren todos los ingredientes que utilizan y descubra qué aceites esenciales resuenan más con usted.
